La endoscopia de columna es una técnica que permite abordar la patología de columna vertebral, mediante incisiones de entre dos y cuatro milímetros en función de la patología. Es una técnica mínimamente invasiva.
Las patologías que se pueden tratar son muchas, únicamente un pequeño porcentaje no pueden tratarse mediante esta técnica. Por ejemplo, hernias discales localizadas a distinto nivel, fracturas, lesiones degenerativas, estallidos vertebrales, etc.
Esta técnica presenta numerosas ventajas, entre ellas, una agresión de los tejidos mínima. Además, al no existir sangrados y la aplicación de una anestesia muy poco invasiva, la cirugía se realiza en unos márgenes de seguridad super elevados.