Para que la madre pueda cumplir exitosamente el embarazo, en el primer trimestre ocurren una serie de cambios para que se produzca una adaptación fisiológica al embarazo.
Algunos síntomas NO son normales y pueden indicar que tienes alguna enfermedad grave como preeclampsia, infección o hemorragia; o que el bebé está en riesgo. Se debe acudir al hospital inmediatamente.